Verdades absolutas

La mayoría de mujeres y hombres (aunque algunos no lo quieran aceptar) nos hemos visto en la necesidad de someternos en alguna dieta. Si bien, para algunos el llevar una vida saludable es simplemente su estilo de vida, existimos muchos otros que simplemente no podemos resistir caer ante tantas tentaciones, no importa de qué nacionalidad sean amigos, sabemos que en todos lados hay manjares y exquisiteces a las que hasta el alma nos duele de pensar en no comerlas. Pero no están solos, el día de hoy, en un acto de hermandad, les platicamos de las cuatro etapas que todos pasamos cuando nos ponemos a dieta.

 

 

 

Motivación al 1000%

Ya es lunes y ahora sí estás dispuesto a iniciar tu dieta, tus niveles de motivación y energías están al cien, te inscribes al gimnasio y te compras mucha ropa deportiva. Comienzas tu día con un sano jugo, de esos que son verdes y hasta tienes que masticar para pasártelo, mides tu comida con precisión milimétrica. Ahora tu cuerpo es tu templo, así que solo le darás lo mejor; frutas, verduras, solo carne asada, ADIÓS A LAS GRASAS, YA NO MÁS DULCES Y CHOCOLATES, el mundo al fin conocerá a la mejor versión de ti. Podrás lucir ese traje de baño como siempre lo soñaste…

 

 

 

Salir es un suplicio

Todos los que han estado a dieta han sufrido el tener que mezclar su nuevo estilo de vida con su vida social; tus amigos te invitan a echar unos tragos y comer pizza o algo parecido, los ojos te brillan de imaginarlo y empiezas a salivar de pensar en una deliciosa y grasosa rebanada de pizza, con su quesito derretido. Pero una voz en tu cabeza te dice ALTO, ¡ya casi bajamos medio kilo! Así que decides ir, pero en vez de aquel manjar tú pides una nutritiva y fresca ensalada y un refresco de dieta, mientras tus amigos toman litros de cerveza frente a ti. No se vale

 

 

 

Dulces fantasías

Ya después de un tiempo de tanta verdura y fruta es inevitable empezar a fantasear con todos esos dulces y comida que tan feliz te hacen. Cierras los ojos y ahí están: pasteles, tacos, pizza, papas fritas, cocteles, es como el buffet que siempre has querido y ahí estás, mientras hermosos modelos te alimentan como si fueras un rey o una reina y lo mejor, NO ENGORDARÁS ¿sabes por qué? porque solo es un SUEÑO. Así que despiertas para darte cuenta que ya es hora de pararte a correr y tomarte otro jugo.

 

 

 

Todo lo que sube tiene que bajar

Ya llevas algunas semanas de ser el ser más disciplinado en el mundo, te sientes como nunca y hasta juras ya te ves más delgado. Así que ya no vas tan seguido al gym como los primeros días, pretextos como limpiar la casa, echarse una siesta, ir por un café o que tienes mucho trabajo comienzan a alejarte de sus sanas decisiones del pasado, y así pasa el tiempo, un día se convierte en dos y dos en tres y cuando te das cuenta ya se ha vencido tu suscripción del gimnasio.

 

 

 

Ánimo

Queridos amigos, todos pasamos por lo mismo, así que no se angustien más, solo se trata de adaptarse a los cambios y si un día se les antoja un postre o salir con sus amigos y echar unas cervezas no pasa nada. ¡Ánimo! recuerden que esta vida no se trata de prohibiciones, sino de saberse medir y no excederse. Compartan con todos sus conocidos que alguna vez se hayan puesto a dieta, cuídense mucho y nos leemos en la siguiente.